jueves, 12 de junio de 2014

Dentro de un agujero de gusano


¿Te has preguntado cuantas cosas han pasado desde la última vez que te escribí?. Ahora lo hago desde alguna parte escondido en una inmensa nube de polvo que apenas me deja ver nada. He acabado oculto en la inmensidad de la rutina y a veces asfixiado por la urbe que tanto odio. Urbe en el sentido mas extenso de la palabra, no en el físico, pero si en el entramado mudo que envuelve el día a día de cualquier persona. Paradójico ya que simpre afirmaste que yo no era "cualquier persona" y ahora me he convertido en uno mas para los demás, nunca para ti.

Han cambiado tantas cosas, pero aún así, todo sigue siendo igual, tu eres lo único que no ha cambiado. Todo cambia, pero tu pareces ser imperecedero, conservado en el mejor de los conservantes.

Han pasado tantas cosas, que resumirlas en una sola carta resultaría arriesgado, incluso vulgar. Reducir la importancia de todo lo que ha pasado sería quitarle la importancia que realmente han tenido para ti y para mi.

Algunas han sido alegres, otras tristes, y otras profundamente dolorosas, aún así han pasado, y lo mas importante para mí es que has estado ahí, sigues estando y mi reloj de arena fabrica pequeños granos conforme pasan los días para no agotarse nunca, solo así deje de pensar cuando llegaría la hora de acabar con la cuenta atras y despertar del sueño, y eso nunca ha pasado.

Aunque parezca que a veces me olvido de lo mas importante que eres tu, ten por seguro que jamás lo he hecho... sigo ahí, como siempre, solo que ahora estoy metido en un pequeño agujero de gusano que espero nos lleve muy lejos. Las cosas cambian,pero en este caso, no cabe decir aquello de "Aquellos maravillosos años".

Te quiero.